Olga Mariela Januszewski
Contadora Pública especializada en riesgo crediticio
La confianza no se solicita en un banco;
se debe ganar...o más bien, minar!
La confianza es como un vaso roto, una vez que se rompe por más que intentes
arreglarlo, ya no vuelve a ser lo mismo. Y en ese principio se basan las
criptomonedas. Tomaron los cristales rotos de la sociedad descreída del sistema
financiero que traicionó su confianza; para construir un refugio alternativo que
suplante un régimen obsoleto? que no dió las suficientes respuestas a los cambios
requeridos por una sociedad con sed de cambios...pero sobre todo seguridad!
Y la gran paradoja de todo esto es que Bitcoin no requiere confianza: ya que es
completamente de código abierto y descentralizado. Esto significa que cualquiera
tiene acceso al código completo en cualquier momento. Cualquier desarrollador en el
mundo puede verificar como funciona. Todas las transacciones y bitcoins creados
durante su existencia pueden ser consultados claramente en tiempo real por cualquier
persona. Todos los pagos pueden hacerse sin depender de terceros y todo el sistema
está protegido por algoritmos criptográfico revisados por usuarios; parecido a lo que
se utiliza en banca electrónica. Ninguna organización ni individuo puede controlar
Bitcoin y la red permanece segura aunque no se pueda confiar en todos sus usuarios.
Para muchos cryiptonautas este motivo es más que suficiente para sentirse seguro a la
hora de ejecutar sus transacciones con criptomonedas. Esto, a su vez le otorga un
valor intrínseco, de modo que el código abierto facilita la creación de forks
(bifurcaciones donde los tenedores de bitcoins tienen derecho a una parte de la
emisión de nuevas criptomonedas que utilicen el proceso histórico de su blockchain
hasta la fecha de la bifurcación). Hasta el momento se produjeron 5 forks importantes:
Bitcoin Cash, Bitcoin Diamond, Bitcoin Gold, Bitcoin Private y Bitcoin SV. Todos
nacidos de bitcoin.
Si bien se dificulta predecir cuántos forks habrá en el futuro, se estima que el carácter
abierto del bitcoin es un campo propicio para que sigan sucediendo. Los forks
constituyen una forma novedosa de flujo de fondos en esta nueva era.
Ahora bien; expuesto las razones para negociar con monedas digitales; y como si se
tratase de una competencia virtual, cuáles son los sustentos que respaldan a la moneda
fiduciaria? Mas concretamente; cuál es el verdadero respaldo del dólar y el oro?
pués bien, el dinero que circula en el mundo, incluido el dólar; no tiene valor
intrínseco ni respaldo tangible y su único valor es su aceptación como medio de pago;
es decir; un valor fiduciario; basado en la confianza de quien lo da y quien lo recibe.
El oro a su vez; a pesar de ser algo tangible; tiene un valor relativo; dado
especialmente porque es usado como instrumento de reserva por los Bancos Centrales
de los países; pero en realidad; el oro tiene un uso limitado a muy pocas aplicaciones
prácticas. De ello podemos inferir que las monedas del mundo que sustentan parte de
su valor en el oro; no tienen ningún respaldo material ni sólido; sino únicamente la
buena fe de emisores y usuarios de dichas monedas; porque ninguna persona puede
comer o beber oro y, como se dijo antes; su uso en otras actividades económicas es
también restringido. Se podría incluso decir que el oro también es un instrumento
fiduciario.
Como vemos hasta acá; todo es cuestión de fe ciega. Aunque a veces es mejor abrir
los ojos para ver mejor y no sólo mirar. Y si vemos bien la historia nos encontramos
con que en el año 1971; el presidente Richard Nixon; en un contexto de inflación
mundial, con abundantes dólares estadounidenses circulando; se convirtieron
masivamente los dólares en oro, lo que dió lugar a un importante vaciado del oro de la
Reserva Federal. Cada vez era mayor la desconfianza hacia el dólar y el sistema de
Bretton Woods parecía al borde del colapso. Todo ello significaba suspender la
convertibilidad oro en dólar; se dió por terminado el sistema fijo que establecía que
una onza de oro equivalía a 35 dólares. Los dólares ya ni estaban respaldados por el
oro; pasando a ser dinero "fiat". En otras palabras, que el dólar pasa a estar respaldado
por la autoridad que lo emitía. Ya no había un metal que respaldaba las emisiones de
dólares, sólo una autoridad monetaria en la cuál cuantas personas se fian o quién se
"fiat" en ella, luego del colapso económico mundial?
Esto ya nos marca que el problema de confianza ya no sólo recae en la moneda, sino
que también se expande a todo el sistema financiero tradicional a través de bancos y
de gobiernos, que no estuvieron a la altura de las circunstancias cuando debieron
responder; esto es en el colapso financiero que implicó la pérdida de confianza en un
sistema betusto que le dió la espalda a los clientes, en el momento que más
necesitaban de ese respaldo, dando prioridad al rescate de bancos que no fueron
capaces de advertir el advenimiento de la explosión de la burbuja financiera
acontecida en el 2008. Y no es casualidad que Bitcoin surja en este contexto ya no
como un sistema financiero alterno al tradicional por oposición al régimen establecido
y como una simple rebeldía anti sistema (para ser más precisos; habian transcurrido
sólo quince días de la quiebra de Lehman Brothers cuando se da a conocer finalmente
el conocido "libro blanco", puntapié que da origen a Bitcoin como un verdadero
manifiesto de intenciones, llamado a declarar la necesidad de un nuevo sistema
financiero descentralizado, que evite una nueva próxima quiebra bancaria con las
mismas consecuencias y victimas de siempre). Sería un error conceptual pensar de
esta forma. Bitcoin es mucho más que eso. No se trata de hacerse multimillonario ni
derrocar al sistema bancario; porque en este pensamiento digital y disruptivo el
hambre revanchista no encuentra su lugar. Todo lo contrario, es una filosofía outsider.
oficialmente Bitcoin nació del misterioso Satoshi Nakamoto (una identidad falsa,
podría ser un hombre, una mujer, un colectivo) en 2008, pero diez años antes un
grupo de mentes brillantes en la costa oeste de Estados Unidos ya coqueteaba con la
idea de crear un estado paralelo en internet. Muchos, aunque no todos; abrazaban
ideas libertarias al estilo estadounidense; que aboga por reducir el estado a la mínima
expresión y eliminar la Reserva Federal, pero no es necesariamente progresista en lo
social. Apasionados por la tecnología, no se fiaban del sistema. Empezaron a
compartir conocimientos a través de una lista de correo llamada : Cypherpunks". Si
bien está lista se estableció a partir de 1992, el grupo y la idea se gestaron y se
establecieron en la década de los 80 a partir del trabajo de David Chaum; quien fue
uno de los primeros especialistas preocupado por la privacidad de las transacciones
financieras y desarrollar un sistema digital que resuelva el problema.
El movimiento Cypherpunk enarboló la bandera de la privacidad, especialmente ante
la amenaza del control y la censura por parte de gobiernos y autoridades centrales
sobre el desarrollo tecnológico, la información y el intercambio de valor.
Así, la privacidad podría entenderse como el legítimo derecho de cada ciudadano del
mundo de revelar solo la información que desea. Este es un poder para estos activistas
y podría resumirse en la siguiente frase del Manifiesto Cypherpunk de Eric Hugues:
"la privacidad es el poder de revelarse selectivamente al mundo".
No se trata sólo de un problema de privacidad, éste tema cobra especial relevancia en
el contexto de sociedades abiertas, de libertades, pero en medio de la era digital. Así,
los miembros del movimiento cypherpunk no sólo discutían y teorizaban sobre el
tema, sino que desarrollaban softwares para ayudar a conseguir ese objetivo.
La mayoría de los miembros de la lista de correos eran prominentes investigadores y
especialistas en informática y ciencias asociadas. Y además de temas de privacidad,
discutían los problemas asociados al monitoreo gubernamental, el control corporativo
de la información, entre otros.
Una mención especial se merece la criptografía. Recordemos que en ese momento, el
uso civil de esta tecnología estaba prohibido, y el gobierno estadounidense la
calificaba como "munición: con fines de exportación, de manera que su expansión
comercial no era posible. El gobierno estadounidense intentó controlar este tipo de
desarrollos e incluso el Código de la Pretty Good Privacy (PGP), fue publicado en
un libro de papel para sortear estas imposiciones.
Y de ahí nació la idea de un universo en el que los estados no tuvieran nada que decir.
Por caso no olvidemos que en el sur del mundo, no todos los que depositaron dólares,
recibieron dólares allá a lo lejos y hace tiempo, para ser más precisos en el 2001, en
una tierra extraña de promesas perdidas llamada Argentina. No mucho más tarde en el
tiempo y casi como el efecto expansivo de una bomba, sucesos similares se replicaban
en diversos puntos del mundo. La globalización es como la imaginación, no tiene
límites. Las ansias de ganancias desmedidas tampoco. La diferencia radica en que esta
vez la fe entonces recuperó la vista; empezó a entender que la libertad financiera, al
igual que cualquier otra libertad ni se pide ni se gana, se proclama desde cada uno de
nosotros hacia afuera. Como una forma de empoderamiento no solo financiero sino
también civil; cada ciudadano bancarizado entendió que todo el sistema (no sólo los
bancos) manejan a discreción sus fondos a cambio de poca o nula información basado
en....la confianza; que viene de...un sistema que cometía sistemáticamente los mismos
errores; pero no pagaban con sus fondos propios; sino con los depósitos de los
crédulos clientes, a los cuales alguien, alguna vez les enseñó a creer en la banca y
todos sus aliados.
Así; en una misma línea, bancos, dinero, gobiernos, mercado, todos forman parte de
esta confianza basada en la buena voluntad de cada ciudadano que habita este planeta
tierra.
Moraleja de esta fábula: las criptomonedas nacieron por el mismo motivo que la
banca tradicional empezó a declinar: la desconfianza. Y es así como la falta de certeza
en el dinero se hizo extensivo al sistema financiero que lo sustenta y manipula; podría
hacerse extensivo por traslación desde el mundo cripto al mundo Fintech. Colocando
al mundo financiero tradicional de cara a la necesidad de replantear los verdaderos
motivos de su existencia: el ánimo de lucro desmedido o alentar al ahorro y al crédito.
Mas allá de la banca privada; donde quedarian las aspiraciones del Banco Central de
cualquier país por controlar los sistemas monetarios; aún cuando la moneda tenga
como respaldo la fe que mueve montañas...y mueve la cotización de los billetes
también!
Es necesario entender que estamos frente a una nueva revolución; que va más allá de
lo tecnológico o digital; es una era en donde la confianza juega un rol fundamental
como bien intangible que debiera observar el mercado como un nuevo indicador y
donde sin lugar a dudas; el nuevo lema a imponerse es: "In crypto we trust